Las firmas de moda y puericultura española facturaron un 31,2% más en el extranjero en 2013, alrededor de los 335,7 millones de euros; con Italia, Portugal y Emiratos Árabes Unidos como principales clientes internacionales
Una cifra que, a su vez, creció casi un 30% respecto al mismo periodo de 2012, cuando la exportación supuso 259 millones de euros. Los subsectores que más triunfaron fuera de nuestras fronteras fueron moda infantil (81%), calzado (11%) y puericultura (8%).
La apuesta por la internacionalización del sector ha quedado reflejada igualmente en el aumento del número de empresas que ha comenzado a vender sus colecciones en otros países. De hecho, el 72% de las firmas de moda infantil y puericultura exportaron en 2013, un 2,5% más que el año anterior. La Unión Europea siguió siendo nuestro principal cliente, acaparando el 80,3% del total de ventas: Italia, Portugal y Francia se situaron a la cabeza en la UE, siendo además los principales competidores del sector español en el mundo. Fuera de nuestros socios comunitarios, la moda infantil y la puericultura españolas consolidan su posicionamiento en México, Rusia, Estados Unidos, Emiratos Árabes Unidos y Turquía.
En cuanto al grado de implantación de nuestras firmas en otros mercados, Portugal fue el país con mayor número de tiendas y distribuidores de moda española en el exterior, seguido de Italia y Francia. En la estrategia de comercialización se confirma la apuesta por canales tradicionales –tiendas propias, multimarca, cadenas especializadas, franquicias, grandes almacenes...–, con una importante irrupción del comercio electrónico y una predilección natural por las cadenas monomarca.
En unas primeras previsiones para 2014, ASEPRI, que engloba a más de 183 empresas asociadas y 300 marcas adheridas, augura un incremento del negocio internacional y una tendencia al alza basándose en las características del producto nacional frente a otros competidores: seguridad, diseño, innovación y una excelente calidad-precio.
En términos de ventas internacionales, España se sitúa por delante de mecas de la moda y del diseño como Italia y Francia, a los que supera gracias a una oferta de alta calidad a precios muy competitivos. Conviene señalar que, a los datos proporcionados por los miembros de ASEPRI, habría que añadir la facturación de grandes cadenas españolas como Inditex o Grupo Cortefiel, además de marcas de moda masculina y femenina –Custo Barcelona, Adolfo Domínguez, TCN...– que han apostado en los últimos años por crear líneas infantiles y de los que no suelen hacerse públicos los balances.
Las marcas españolas, a la conquista del mercado foráneo
Muchas firmas nacionales han sabido ver en la crisis una oportunidad, expandiendo sus horizontes comerciales a nuevos países. Es el caso de Bóboli, que ha entrado en mercados tan dispares y lejanos como Letonia, Taiwán, Holanda y Perú; y facturado casi 8 millones de euros en el exterior.Palabras mayores son la trayectoria internacional de Mayoral, que cuenta con 11 filiales repartidas por todo el mundo y un 60% –144 millones de euros– de su facturación en mercados como México o Canadá; de Charanga, que prevé abrir hasta 150 tiendas en el extranjero en el próximo lustro; o de Pablosky, que ya opera en 35 países, algunos tan dispares como Azerbaiyán, Túnez o Marruecos.
Latinoamérica se ha alzado en los últimos años como el mercado natural e imprescindible de la moda infantil española dado la afinidad cultural y la similitud de gustos. En concreto, en México se encuentran presentes Neck & Neck, Mayoral, Tuc Tuc, Pili Carrera y Gocco, algunas con tiendas y distribuidores propios y otras a través de corners de moda en grandes almacenes bajo el paraguas de Marca España.
